¿Sabes cuál es el orden exacto en el que tienes que aplicar tus cosméticos?

Ya sabemos que el cuidado de nuestro rostro es fundamental para que, además de tener una piel sana y saludable, cualquier maquillaje se luzca y destaque nuestras facciones. Pero, ¿sabes exactamente cuál es el orden y los tiempos que necesita cada uno de los productos que aplicas en tu cutis? 

Es un hecho. La efectividad de las cremas, aceites, geles, espumas y sérums que aplicas en tu rostro depende de que lo hagas en el orden correcto, y también de la forma correcta. 

Lo primero que hay que saber, es que existen dos reglas universales que nunca hay que olvidar y que siempre debemos seguir al pie de la letra: hay que respetar las texturas de los productos y, al mismo tiempo, su función. Los productos cosméticos siempre se aplican de menor a mayor densidad. Esto se simplifica si piensas que al aplicar primero un producto muy denso, este se transformará en una barrera para uno más ligero.

También se debe considerar la función: todos los productos que tienen por objetivo hidratar la piel, se aplican sobre un rostro limpio y después de haber usado tónico. Debido a que este producto tiene por función reequilibrar el pH de la piel, no sería efectivo hidratar antes de equilibrar.

Estas dos mandamientos beauty se siguen al pie de la letra en la rutina de día y en la rutina de noche.

1.- Limpiador en base a aceite

El primer paso de toda rutina de belleza es limpiar. Y, en la doble limpieza, el paso número 1 es con aceite. El aceite limpiador elimina la suciedad, impurezas, maquillaje e incluso el protector solar y, además, prepara la piel para que absorba mucho mejor los tratamientos de belleza nocturnos (puedes leer la nota que hicimos aquí).

Forma correcta de aplicación: aplica unas gotitas del limpiador en aceite en tus manos limpias y secas y aplica sobre tu rostro (este también debe estar seco). Si tu limpiador es en bálsamo, con una pequeña espátula, quita una cantidad súper moderada en tu rostro. Realiza movimientos circulares y retira el producto con agua tibia.

Es apto para todo tipo de pieles, y sí, es aún más perfecto para las con tendencia acneica.

Cuándo aplicar: ideal en las noches. Aunque si utilizaste productos muy pesados durante tu rutina nocturna, puedes emplear el limpiador en aceite durante tu rutina matutina para eliminarlos.

2.- Limpiador de base acuosa

El objetivo del segundo paso es eliminar lo que no consiguió barrer el primero y también las impurezas de bases acuosas como el sudor. Aquí hay variadas opciones, puedes encontrar leches limpiadoras, que son ideales para las pieles normales y también geles y espumas, que son productos enfocados en pieles mixtas y/o grasas. 

Forma correcta de aplicación: sobre la piel humedecida con agua tibia, aplica el producto en movimientos circulares hasta conseguir espuma. Recuerda hacerlo con cuidado y suavidad. Aclara con agua tibia también y seca muy bien con una toalla limpia o con tissues.

Cuándo aplicar: mañana y noche.

3.- Exfoliante

Este paso no se realiza todos los días. Dependiendo de las necesidades de tu piel, generalmente la exfoliación se realiza 1 vez a la semana para quienes tienen la piel normal a seca y dos veces por semana para quienes tengan piel mixta o grasa. 

La exfoliación tiene por objetivo eliminar las célular muertas que se acumulan en nuestra piel y que luego provocan inflamaciones, imperfecciones y opacidad del rostro. Existen actualmente dos tipos de exfoliación que podemos hacer en casa: la más conocida es la exfoliación mécanica donde tienes un producto con pequeñas partículas que arrastran las células muertas a medida que vas aplicando el producto en tu piel. La segunda es la exfoliación química que utilizan ingredientes como los alfahidroxiácidos o AHA (ácido láctico y ácido glicólico) y los llamados betahidroxiácidos BHA (como el ácido salicílico).

Forma correcta de aplicación: la exfoliación mecánica se realiza sobre la piel humedecida con agua tibia y los movimientos deben ser cuidadosos y circulares. El producto se retira con agua templada y el rostro se seca delicadamente con una toalla. Mientras que en la química, el producto se aplica en un pétalo de algodón con el que luego se masaje el rostro. Aquí no es necesario lavar con agua, sino que hay que esperar a que el producto se absorba para continuar con el siguiente paso.

Cuándo aplicar: lo ideal es hacerlo en las noches. Si exfolias durante la mañana, trata de no exponerte demasiado al sol durante el día y reaplica el protector solar cada 3 a 4 horas aunque estés dentro de tu casa.

4.- Mascarilla de limpieza

Las mascarillas purificantes, de arcilla o limpieza deben aplicarse antes del tónico porque su función es limpiar los poros en profundidad. Lo ideal es utilizarla una vez a la semana.

Forma correcta de aplicación: dependerá de cada formato de mascarilla así que lee sus instrucciones de uso y guíate por ellas.

Cuándo aplicar: puede ser en la mañana o en la noche, la decisión es tuya.

5.- Tónico

Fundamental en nuestra rutina y te podemos asegurar que el tónico no arde ni es irritante, sino que todo lo contrario, los buenos tónicos equilibran el pH de nuestra piel, la hidratan e incluso reducen el tamaño de los poros.

Forma correcta de aplicación: puedes aplicar con tus dedos o distribuirlo por tu cara con un pétalo de algodón.

Cuándo aplicar: día y noche.

6.- Mascarilla hidratante

¡Son nuestras mascarillas favoritas! Lo ideal es que al momento de su aplicación, te relajes y dejes que tu piel absorba súper bien todas sus propiedas. Hay distintos formatos como tela, hidrogel, crema, gelatina y celulosa y puedes utilizarlas una o dos veces a la semana, dependiendo de las necesidades de tu cutis. 

Forma correcta de aplicación: dependerá de cada formato de mascarilla así que lee sus instrucciones de uso y guíate por ellas. Ten en cuenta que dejarlas en tu rostro por más tiempo de lo que especifíca en sus instrucciones no aumentará su eficacia. Las mascarillas hidratantes no necesitan que las retires con agua tibia. 

Cuándo aplicar: día y noche.

7.- Esencia

Las esencias son un producto que forma parte de la rutina coreana de diez pasos. Se caracterizan por tener una potente combinación de ingredientes activos y suelen tener una textura bastante similar a la de los sérums. ¿Su plus? Ayudan mucho a que los productos que aplicarás después sobre tu rostro, penetren mejor y cumplan eficazmente su objetivo.

Forma correcta de aplicación: puedes aplicar con tus dedos o distribuirla por tu cara con un pétalo de algodón.

Cuándo aplicar: mañana y noche.

8. Sérum

Es, probablemente, uno de los productos más importantes de la rutina de skincare. Los sérums son una bomba concentrada de activos que, además de absorberse ultra rápido, ayudará a nuestra piel de acuerdo al objetivo para el cual fue diseñado: hidratar, dar luminosidad, aclarar, despigmentar, reparar, nutrir, anti-age, etc.

Forma correcta de aplicación: aplica dos o tres gotitas sobre tus manos limpias y secas. Presiona, muy suavemente, contra tu rostro (mejillas, frente, mentón y nariz) y cuello, tus palmas y dedos por 1 a 2 segundos en cada toque.

Cuándo aplicar: mañana y noche.

9.- Contorno de ojos

Es una de las zonas más delicadas de nuestro rostro, debido a que la piel del contorno de los ojos es súper finita y delicada. Y, sí, como debes estar sospechando…¡es una de las primeras que delatan el paso de los años! (y también si no has cuidado bien tu piel).

Forma correcta de aplicación: aplica el producto que tengas enfocada en el contorno de ojos usando tu dedo anular hasta el límite de las cejas. No des golpecitos como te deben haber enseñado hace algunos años atrás, sé cuidadosa y distribuye desde adentro hacia afuera hasta que el producto se absorba.

 Cuándo aplicar: día y noche.

10.- Crema hidratante

Un básico esencial. Encontrar la crema hidratante perfecta no es tan simple como puedes pensar. Hay muchos factores en juego: tipo de piel, edad, época del año, momento del día, texturas, etc. Y todos estos factores, además, van cambiando con el paso de los años. El consejo de las y los especialistas es siempre buscar la crema hidratante perfecta para este momento de tu vida.

Forma correcta de aplicación: siempre con las manos limpias, aplica suavemente la crema sobre la piel de tu rostro y también en el cuello, con movimientos delicados. Puedes aprovechar para masajear también.

¿Cuándo? Mañana y noche (puedes tener una crema específica para el día y otra para la noche).

11.- Protector solar

¿Quieres una piel saludable, con un tono uniforme y también mantener las manchitas a raya? El protector solar es indispensable para conseguir estos objetivos. Este se debe aplicar todos los días del año, y aunque no te encuentres directamente expuesta al sol debido a que la luz que emiten los aparatos electrónicos como los computadores y teléfonos, también dañan nuestra piel. 

El protector ideal, y que los especialistas recomiendan, es un SPF50. En el mercado existen un montón de versiones específicas para cada tipo de piel. Uno de los más cómodos, para reaplicar sobre el maquillaje, es el formato en spray.

Forma correcta de aplicación: igual que la crema hidratante. En el rostro, cuello e incluso en las orejas.

Cuándo aplicar: por las mañanas y luego reaplicar cada 3-4 horas.

¿Cuánto tiempo debemos esperar entre una aplicación y otra? 

No hay un tiempo específico, pero se recomienda esperar alrededor de 15 segundos entre un producto y el que le sigue.

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