¡Mira al suelo! Y elige el mejor para tu casa con estos consejos

Si te gusta la madera o el cemento, pero te atormentas pensando cómo los vas a mantener limpios y que duren en el tiempo con el ajetreo de tu casa, es hora de pensar en los cerámicos y sus múltiples estilos y beneficios prácticos de mantención. Te contamos algunas de sus características y cómo combinarlos con tu decoración.

De cerámica

Ideal para cocinas y baños, es el revestimiento más común, y si quieres también puedes usarlas en el exterior, en terrazas o hasta en el living. Es muy resistente, absorbe bien el agua y las hay de mil diseños y formatos. Puede ser lisa o con textura, y existen cerámicas con look de madera, cemento, mármol o piedra. Las hay con acabados brillantes y coloridos, lo que aportará luz y calidez a los espacios.

De porcelanato

Es de alta resistencia, ideal para usarse en zonas de alto tráfico como el living, comedor, baño o cocina. Es de baja porosidad, muy fácil de limpiar y cuentan con una amplia tolerancia a los golpes o impactos, de hecho esta es la gran diferencia con la cerámica. Es un material cerámico que brinda un aislamiento térmico. Entre sus diseños, los hay tipo mármol, granito, piedra, metálicos, en colores y con texturas naturales, satinadas, semi pulidas rústicas y pulidas.

No más alfombras

Gracias a los múltiples patrones y juegos de colores de los porcelanatos y cerámicas, puedes prescindir de alfombras y de elementos extras para la decoración de tus espacios principales. Pueden lucirse por sí mismos. Además recuerda, los porcelanatos y las cerámicas son muy fáciles de limpiar y mantener, por lo que el resultado será siempre un espacio lindo y también práctico.

La tendencia

Lo tonos grises y el juego monocromático del blanco y el negro crean un look moderno, limpio y actual. La idea, en el baño por ejemplo, es revestir los muros de cerámicos blancos biselados (como los del metro de Nueva York) y en al piso jugar con el negro usando el mismo concepto. El toque biselado le da un carácter muy ondero. En cuanto a los albayaldes y los cerámicos más rugosos o rústicos, es mejor aplicarlos en una sala de estar o living para dar así un carácter escandinavo.