Conoce las técnicas y usos decorativos de la cerámica, son un plus para los espacios

La cerámica, desde tiempos inmemorables, forma parte de nuestro imaginario creativo y cultural. De uso utilitario hasta el más decorativo, la cerámica, que toma su forma a partir del barro o arcilla cocida al calor, nos resulta práctica en la cocina, hermosa sobre una mesa de centro y envolvente como florero. En todas sus formas y técnicas, siempre aporta en términos decorativos.

Las técnicas

La cerámica Gres es una técnica donde las piezas son quemadas a muy altas temperaturas (alrededor de 1260°C), y al vitrificar la pasta y los esmaltes, le entrega gran impermeabilidad y dureza al objeto en cuestión. Es una de las técnicas más usadas desde tiempos antiguos; de hecho Japón fue una de las primeras grandes civilizaciones que comenzó a modelar barro y arcilla (además de la porcelana). Sus creaciones, además de ser sencillas e imperfectas, reflejaban los modos de vivir y su cultura cotidiana. Hoy en día muchos de los estudios de cerámica contemporánea se han inspirado en las formas irregulares del quehacer japonés, creando objetos esculturales o decorativos.

El Raku, por su parte, corresponde a una técnica similar al Gres, pero la diferencia está en la quema; para crear cerámicas estilo Raku el horno se utiliza a menor temperatura (1000° C). Los japoneses también fueron los precursores de esta bella técnica, creando, en gran medida, utensilios para la ceremonia del té, como boles, vasos y cucharas.  

Las tendencias

Hoy en día, tanto en diseño, moda y decoración, prevalece todo aquello que no es producido en serie. Por lo tanto diríamos que toda fabricación artesanal, hecha a baja escala y a mano es lo que reina y lo que todos queremos aspirar o tener. En cerámicas, tanto utilitarias como decorativas, pasa lo mismo. Una mesa puesta con una vajilla artesanal, en colores tenues y de formas irregulares refleja vida orgánica y naturaleza, una de las tendencias actuales más importantes y que está moviendo el mundo y nuestras formas de vivir. Así que déjate llevar y a la hora de elegir, opta por colecciones de este perfil.  

Usarlas como elemento decorativo

Las cerámicas, del estilo o técnica que sean, se pueden usar y sacar su máximo partido de mil formas, a veces incluso descontextualizando sus usos. Los platos de una vajilla, por ejemplo, los puedes colgar en la pared formando una pequeña colección de distintos platos (con distintos diseños y colores). Otra idea: a un florero no necesariamente le puedes poner todas las flores del ramo que te regalaron; a veces basta con una sola flor o una sola rosa (y así rememoramos otro detalle de la rica cultura japonesa, nos referimos al Ikebana, el arte de las flores en Japón). ¡La idea es jugar siempre!